13 de enero de 2008

Penumbra

Y si tú supieras...
Tantas veces te nombro, tantas. Tu nombre está anclado en la misma boca que te desea. Tu voz, me agarro a tu voz, a nuestros recuerdos, a cada uno de los besos que han poblado estos labios, esta piel. Me desespero con la misma rapidez con que me enciendo. Tengo miedo de que la necesidad de ti me haga cometer locuras, llamarte entre sueños, aferrarme fuerte a ti para que no vuelvas a irte nunca.
Me abandono, resignada a la vez que aún latente. Sé que me desnudarás, sé que llegarás. El temblor me sacude. Te quiero hacer el amor...

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Por qué tengo que estar tan lejos de ti?¿Por qué no puedo estar ahora contigo, en tu cama, viendo cómo te acercas, cómo poco a poco te voy amando cada vez más...?

Es tanto el deseo que tengo de estar contigo...que creo que me voy a sumir en la locura contigo hasta que nos veamos en la intimidad. Yo espero paciente, no te vayas, ya voy llegando...y haremos el amor hasta que él nos haga.

Te amo, mi niña(K)